DEFINICIÓN:
La reducción de volumen mamario o “Mamoplastía reductora” es el procedimiento quirúrgico que se realiza cuando el paciente desea disminuir el volumen de sus mamas, debido generalmente a que tiene problemas de tipo estético, dificultad en la vestimenta y en la mayoría de casos problemas funcionales causados por el peso aumentado de las mamas que repercute en dolor de espalda y hombros, problemas irritativos de piel debajo de las mamas, todo lo cual se suma al componente psicológico. El procedimiento implica el retiro del exceso de tejido mamario de las mamas y reacomodamiento del tejido residual para que mantengan una proyección adecuada y tamaño de acuerdo al tórax. El procedimiento también implica el levantamiento llamado también “mastopexia”.
PRE OPERATORIO:
Es requisito indispensable la realización de exámenes preoperatorios de sangre y orina, y el riesgo quirúrgico cardiovascular con electrocardiograma, que serán ordenados por el médico tratante con la finalidad de determinar si el paciente reúne las adecuadas condiciones para ser operado o si necesita algún tratamiento previo a la intervención.
En los tiempos actuales de pandemia por SARS-CoV-2 solo serán operados los pacientes sin síntomas relacionados con COVID-19 y con bajo riesgo general para reducir el riesgo de transmisión. El paciente ni ninguna persona que vive con él deben haber experimentado síntomas en los 14 días previos a la intervención. El paciente se realizará pruebas de diagnóstico preoperatorias para COVID-19.
Debe haber compromiso total con la higiene personal, distanciamiento social y otras recomendaciones de COVID-19 contenida en todas las regulaciones gubernamentales emitidas, así como realizar un aislamiento voluntario y las medidas necesarias para evitar cualquier riesgo de contagio en los días previos a la cirugía. El paciente debe ser honesto en revelar esta información para no ponerse en peligro a sí mismo o a otros.
PROCEDIMIENTO:
Para realizar el procedimiento el paciente deberá firmar el consentimiento de la intervención y el consentimiento de anestesia. La intervención se realiza bajo anestesia local con sedación o anestesia general. La elección por el equipo médico del procedimiento anestésico es individual para cada paciente. El paciente será evaluado por el médico anestesiólogo antes de la intervención, donde deben despejarse todas las dudas que se tenga sobre el procedimiento anestésico.
La cirugía se realiza en un centro quirúrgico con la finalidad de brindar todas las seguridades del caso, en lo que se refiere a la infraestructura como al personal médico y auxiliar. Se administrará profilaxis antibiótica por vía parenteral.
El procedimiento consiste básicamente en retiro de tejido mamario excedente y rearmado de la mama con el tejido residual, el cual es fijado en la fascia del músculo pectoral mayor. Las cicatrices resultantes son generalmente en forma de una ancla (alrededor del mamilo más una cicatriz vertical junta con una cicatriz en el pliegue submamario). Las suturas del surco submamario son reabsorbibles y solo se dejan puntos temporales en la herida periareolar y vertical. Toda la mama queda cubierta por parches de cinta anti alérgica microporosa en forma de sostén.
Una vez terminada la intervención se procede a colocar un vendaje compresivo elástico. El paciente permanecerá en sala de recuperación por dos horas en debe permanecer una noche en hospitalización.
POST OPERATORIO:
El paciente deberá cumplir las indicaciones de ingesta de medicamentos en su domicilio, los cuales se indican por escrito. Se debe mantener el vendaje compresivo elástico adecuadamente y realizar reposo evitando cualquier esfuerzo físico durante los primeros días del post operatorio. A partir del 5° día usará un sostén post operatorio durante 30 días, después de los cuales podrá usar los sostenes comunes, teniendo cuidado de retirar las barbas de metal, si los tuviera.
Las curaciones se realizan en consultorio el 5°, 8° y 12° día del post operatorio. Posteriormente, el paciente será citado para sus controles post operatorios al mes, 2 meses, 3 meses, 6 meses y
12 meses, después de los cuales será dado de alta definitiva. Estos controles son importantes para evaluar el proceso de cicatrización y detectar alguna alteración que se pudieran presentar.
La forma de la mama irá cambiando conforme pasen los meses. Al segundo mes del post operatorio se podrá tener una forma casi definitiva, la cual tendrá mínimos cambios las semanas siguientes, sin embargo, las cicatrices tendrán un proceso de evolución más largo. El proceso de cicatrización tiene tres etapas: inflamatoria, proliferativa y de maduración, de duración promedio de un año, por lo que los resultados definitivos no serán inmediatos. Es importante que el paciente no deje de acudir a sus controles para evaluar el proceso de cicatrización y prevenir a tiempo la formación de una cicatriz patológica e inestética.
